¿Quiénes somos?

PRESENTACIÓN


“Los únicos interesados en cambiar el mundo son los pesimistas, porque los optimistas están encantados con lo que hay”.
José Saramago


¡NI UNO MÁS, NI UNA MÁS! Es un grupo que forma parte de la sociedad civil, desorganizada, pero intensa y crítica; a veces indignada, a veces agobiada por la desesperanza ante la creciente violencia asociada con la denominada “estrategia” de combate contra las drogas. Miles de gotas han derramado el vaso, pero hay momentos cruciales para la conformación de nuestro grupo. Tras la masacre de jóvenes en Villas de Salvárcar, Ciudad Juárez, el 31 de enero de 2010, el horror fue tal que creíamos que no podría pasar nada peor. Sin embargo, tras otras masacres de jóvenes que parecían aisladas, en distintas ciudades, otra más sucedió el 22 de octubre de 2010 en Horizontes del Sur, de nuevo en Cd. Juárez.

Ya desde antes estábamos preocupadas por el feminicidio en Cd. Juárez, que se empezó a documentar desde 1993. Sabíamos que, a pesar de la organización de la sociedad juarense, mexicana e internacional, la impunidad alrededor de los asesinatos de mujeres pobres en esa ciudad, ha seguido imperando. Varias de nosotras habíamos ya denunciado esa impunidad. Ahora observábamos también el incremento de muertes violentas en hombres cada vez más jóvenes; víctimas y victimarios . Todo esto en un contexto de criminalización de la pobreza y de la juventud y a la par de ataques y persecuciones, a veces mortales, de defensorxs de derechos humanos.

Si bien habíamos formado ¡NI UNO MÁS, NIUNA MÁS! con anterioridad, como a otras personas y organizaciones el asesinato de Marisela Escobedo, quien buscaba justicia para su propia hija asesinada, fue para muchos y muchas la última gota de lo in-soportable..

En noviembre de 2010 formamos este grupo para protestar contra los asesinatos de jóvenes y de mujeres, contra la impunidad y la criminalización. Empezamos con la llamada a una marcha en protesta por la masacre de Horizontes del sur, en una semana en que hubo varias marchas espontáneas. La nuestra reunió a unas 200 personas. Fue pequeña pero nos convenció de que había que abrir espacios ciudadanos para la expresión del rechazo a la política represiva del gobierno, que podíamos contribuir no sólo a expresar emociones, como el dolor y la rabia, sino también a propiciar la reflexión. Por eso, desde fines de 2010 nos organizamos también a través de este blog y cada quien desde nuestro lugar de trabajo y desde nuestra propia formación personal y profesional hemos ido ampliando nuestro ámbito de actuación: organizamos marchas o convocamos a las que consideramos importante apoyar, organizamos un cine-debate con la CDHDF, difundimos información relacionada con temas que nos afectan en el contexto de violencia extrema, criminal e institucional, y expresamos nuestras opiniones o las de jóvenes a quienes invitamos a escribir para enriquecer nuestras reflexiones y las de quienes nos leen. Asimismo, como parte de la sociedad desorganizada pero crítica y capaz de asumir y ejercer la ciudadanía, hemos dirigido peticiones, demandas y protestas a distintas instancias gubernamentales, en particular para exigir rendición de cuentas de los recursos que se han destinado a prevenir y sancionar la violencia contra las mujeres.
Nuestros objetivos son entonces:

  • Difundir información útil para pensar el presente y cambiarlo para mejor o al menos para entenderlo
  • Abrir espacios para la expresión de toda la ciudadanía, en particular de jóvenes
  • Promover el diálogo y el debate acerca de la realidad actual, desde la pluralidad y con sentido crítico, en libertad y con plena independencia
  • Exigir a los y las agentes del Estado que cumplan con sus obligaciones y demandar al Estado la garantía y respeto de los derechos humanos de todos, en particular de jóvenes y mujeres.
  • Contribuir a la construcción de un país viable, con futuro y también con presente.
Creemos en el poder de las palabras, en la disidencia, el desacuerdo y la resistencia como herramientas para cuestionar lo que se da por sentado, para pensar en maneras posibles de vivir, aun sabiendo que “un mundo sin violencia” es imposible.

Creemos en la posibilidad de cambio, pero no con el Estado ni desde el Estado. No pertenecemos a partidos políticos y preferimos la independencia. Actuamos sin embargo en coordinación con personas, grupos o instituciones en que podemos confiar.


Somos los que estamos y estamos los que somos...

  • IRMA SAUCEDO GONZÁLEZ
Soy una feminista convencida de que la acción política requiere un Posicionamiento Ético Feminista que promueva la resistencia al poder y que lleve el debate de los márgenes al centro de la disputa teórica y política de los movimientos sociales. Desde 1986 y hasta la fecha he dedicado gran parte de mi energía a promover el derecho de las mujeres a vivir una vida libre de violencia en México. En este campo he promovido espacios de diálogo entre la creación de conocimiento y la implementación de propuestas innovadoras para modificar la situación que viven las mujeres. Buena parte de mi trabajo lo he dedicado a promover colaboración entre diversos sectores de la sociedad civil, la academia, los servidores del estado y las organizaciones de mujeres porque considero que la única manera de lograr cambios sustantivos en la sociedad es creando sinergias entre las personas comprometidas con la equidad y la justicia. Actualmente soy presidenta de Corpórea, S.C, una sociedad civil cuyo objeto es la prevención de la violencia y la construcción del bienestar.

  • LUCÍA MELGAR
Crítica cultural y profesora de literatura y estudios de género. En los últimos años me he dedicado al estudio de las violencias, sus conceptos y representaciones; cada vez más, me ocupo de los efectos de las violencias en la vida cotidiana. Académica-activista por los derechos humanos, en particular los derechos de las mujeres, y contra el feminicidio y la impunidad. Pertenezco al grupo Derecho a Decidir. Colaboro en el blog Espejos laterales de NAR con reflexiones sobre violencia, cultura y política.

  • LUCIANA RAMOS LIRA
Psicóloga social e investigadora. Desde hace varios años me interesa estudiar el impacto traumático de las diferentes manifestaciones de la violencia, a nivel individual y psicosocial. Le he dedicado mayor atención a las violencias que padecen las mujeres y las y los jóvenes, tratando de integrar siempre la perspectiva de género. Como investigadora utilizo enfoques cuantitativos y cualitativos, y me he ido inclinando a desarrollar intervenciones de corte preventivo. Mi lado activista afloró de manera más reciente, lo que me ha conllevado más trabajo y preocupaciones, pero también me posibilita trascender los espacios y burocracias académicas.

  • KARLA FLORES
Soy una Karla, aficionada de la vida cotidiana con una tendencia natural para complicársela a sí misma. Chilanga y extranjera de sí. UNAMita, puma en las finales de futbol, psicóloga por equivocación, activista por necesidad, veterinaria e ingeniera frustrada. Abortista, hereje y blasfema. Mil usos y casi todo terreno (pues no entiendo cómo funciona un motor de combustión). Inconforme, criticona y
amargada. Simplona, calmada y con harta fe en la humanidad.

  • JÉSSICA GUTIÉRREZ
Feminista polipolar, activista. Licenciada en Psicología. Trabajo temas relacionados con violencia contra las mujeres, en particular violencia sexual. Formo parte de la Red de Referencia y Contrarreferencia de Casos de Violencia Sexual en el DF, coordinado por la Comisión de Derechos Humanos del DF. Actualmente soy Coordinadora de Capacitación en “Género, Salud y Bienestar, Corpórea S.C” y participo en Colectiva Feminista con Letra F.

  • JOSE ANTONIO BELLO
Psicólogo, tanatólogo, con experiencia en trabajo con Jóvenes, niñas y niños. Actualmente trabajo para el DIF DF en el área de Desarrollo Infantil, desde 1988 soy activista por los Derechos Humanos en diferentes organizaciones; fundador del Movimiento "Por una Vida Digna AC". En los últimos 10 años me he dedicado a promover los Derechos de las niñas y los niños y contra la violencia al maltrato y abuso sexual infantil.

  • MA. LUISA FERNÁNDEZ APAN
Psicoanalista. Trabajo en la clínica privada y como acompañante terapéutico. Defensora del derecho supremo de todo sujeto a tomar y defender su palabra; del derecho a la diferencia, razón por la cual mi color político es color carne. Creo en los límites, sólo en ellos se puede decir “¡ya basta!”. La última vez que me miré al espejo descubrí que prefería vivir de este lado, por eso me veo empujada a escribir. Ante la seducción de la imagen opongo las mil palabras, aunque por esta vez me sean suficientes noventa y dos.


  • LUIS ANTONIO GASCÓN
Tengo 17 años y aunque parezcauna locura, quiero ser militar de carrera, pues me gustaría que la imagen queprevalece en el país sobre el ejército fuera distinta. Me gusta estar enteradosobre lo que pasa en México y en el mundo, discutir temas relevantes  sin llegar a los gritos. Me gusta disfrutarde la vida, aunque algunos dirían que soy ojoalegre. Soy de mente abierta y quiero un México mejor, así que aquí estoyponiendo mi granito de arena.